Coming Out Day


Es mejor ser odiado por ser quien eres que querido por ser quien no eres.
André Gide

En cualquier reunión en la que, de forma distendida, salen a relucir experiencias en relación a la orientación sexual, siempre hay alguien (ya sea homo, bi o hetero) que pregunta: "¿Y cómo salisteis del armario?". Lo que puede parecer un anecdotario banal es en realidad el relato de la construcción identitaria de un número de personas.

Como ya comenté en relación a otra entrada, el proceso no tiene por qué ser lineal: un estudio de Paula C. Rust, en 1993, huía de los modelos de desarrollo en relación a la construcción de la identidad y construía uno nuevo en el que no existe una "meta" (hetero u homo), sino que hay idas y vueltas continuamente, ya que la identidad no es más que un constructo social que cambia cuando las definiciones y la misma sociedad cambian.

En 1988, Estados Unidos celebró el 11 de octubre el primer National Coming Out Day (Día Nacional para Salir del Armario), organizado por Robert Eichberg y Jean O'Leary con motivo de la Segunda Marcha por los Derechos de Gays y Lesianas en Washington D.C. Actualmente se ha extendido a Suiza, Alemania, Canadá, Croacia, Polonia y Reino Unido (el día 12). En Estados Unidos se está viviendo con una sensibilidad especial, dados los últimos casos de suicidios de adolescentes debido al acoso homofóbico que sufrían.

Yo salí del armario ante mí misma entre líneas, literalmente. Escribí, con diecisiete años, "últimamente pasan cosas por mi cabeza que no voy a concretar por si alguien encuentra esto, pero mi yo futuro sabrá a qué me refiero". Y ahora escribo un blog que se llama Nación Lesbiana... Sí, tu yo futuro sabe a qué te referías.

Usted no es un ser desnaturalizado ni abominable, ni está loca; usted es una parte de lo que la gente llama naturaleza, como cualquier otro ser; sólo que es inexplicable porque… aun no tiene su lugar designado, definido, en la Creación.
Radclyffe Hall

El armario (o clóset) es una metáfora psicoanalítica que hace referencia a una parte del inconsciente. David Tettke sitúa el primer uso de armario como símbolo del secreto en el siglo XVII. A mediados del siglo XX, comenzó a utilizarse en relación a la orientación/opción sexual del sujeto. Antes de la I Guerra Mundial, salir del armario tenía connotaciones de entrada más que de salida, entrada en un submundo homosexual.

Un siglo antes de los disturbios de Stonewall, en 1869, Karl Heinrich Ulrichs abogaba por la autodesignación pública como medio de emancipación. Desde entonces, la invisibilidad ha sido considerada como uno de los mayores males de la vida LGB. A raíz de los suicidios juveniles de las últimas semanas, el periodista Dan Savage ha lanzado el proyecto It Gets Better (Mejorará), una plataforma destinada a animar a lxs chavalxs que estén saliendo del armario y estén sufriendo desprecios e incomprensión.

Un profesor abiertamente gay, en segundo de carrera, comentó en relación a su propia experiencia que la expresión "opción sexual" es una barbaridad, que ninguna persona que tuviera la posibilidad de elegir ser homosexual o heterosexual elegiría lo primero. Pensé "cuánta razón tenía" y utilicé ese argumento en más de una ocasión. Mentira. No quiero entrar en temas de opción/orientación pero, ahora mismo, si pudiera elegir entre ser homosexual o heterosexual, elegiría ser homosexual.

Con diecisiete años pensé que lo había asumido. En segundo de carrera pensaba que estaba completamente fuera del armario. Pero no tenía ni idea, mentira todo. Cómo me hubiera gustado, con nueve años, y con diecisiete años, que alguien me dijera "it gets better". Eso sí, ahora se lo puedo decir yo a quienquiera que me lo pregunte.

3 reacciones

  1. Si, yo no elegiria ser heterosexual. A veces la gente dice eso de "yo no elegi esto" para defenderse de ataques homofobos. A veces pensamos que si salimos del armario de puntillas y pidiendo perdon, nos van a aceptar mejor. A veces creemos que si ocultamos la pluma molestaremos menos, seremos mas normales. Y a veces, si, de verdad querriamos ser distintos a como somos. Que tristes todas estas cosas, verdad? Yo no quiero ser heterosexual, pero si quiero ser diferente a como soy en otras muchas cosas y se que doloroso puede ser.

  2. Claro, guardemos la pluma, ocultemos los símbolos, despreciemos el Orgullo delante de lxs heterxs, no nos demos besos en la calle y digamos "pareja" cuando no quede más remedio que citarlx. Lo peor es que eso no va a hacer que nos "quieran" más...

  3. Pues no Loreto, eso no va a hacer que nos quieran más, pero ocultarlo si que va a hacer que nosotras nos queramos menos.

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